Las sartenes son unos de los utensilios que empleamos a diario para cocinar. No obstante, muy pocos conocen su origen y evolución. Para ello tenemos que remontarnos nada menos que ¡a la época romana! Increíble, ¿verdad? Se podría decir incluso que son tan antiguas como la propia cocina. ¡Descubre más!
¿Cuándo surgieron las primeras sartenes?
Con el descubrimiento del fuego, apareció la cocina, la cocción de la carne y se desarrollaron diversos utensilios culinarios. Cuencos de piedra o morteros eran algunos de los que se empleaban en la Prehistoria. Tiempo después, se desarrollaron los primeros prototipos de sartenes: se sostenían sobre las brasas con una cadena o tenían una base de tres patas.
Sin embargo, para descubrir cuándo surgieron las primeras sartenes debemos acudir a la época romana. Los romanos utilizaron el bronce como material de fabricación. Algunas de ellas se encontraron en lugares como Pompeya y Herculano.
Al ser un objeto tan cotidiano, puede incluso que se desarrollara de forma paralela en distintas culturas, no solo en la romana. Por ejemplo, ha evidencias de su uso durante la dinastía Han de China, donde se utilizaban para evaporar la sal. También se conocían en la antigua Grecia.
Evolución de las sartenes
En los siglos XVI y XVII se crearon las sartenes más a semejanza de las que conocemos a día de hoy. Fue por entonces también cuando los muebles de cocina ya podían sostener estos y otros utensilios como ollas y cacerolas, realizadas en piedra.
Las sartenes fueron evolucionando hasta la invención de las antiadherentes en los años 60. Fue la empresa francesa Tefal la que introdujo en su catálogo una con dichas características, revolucionando totalmente el mercado. Durante esos años también se popularizaron las sartenes de aluminio con recubrimiento antiadherente, que continúan siendo la opción favorita de muchos consumidores.
A las sartenes antiadherentes les siguieron las placas vitrocerámicas o las de inducción. Lo que llama la atención es que el primer robot de cocina las precediera. Lo inventó el británico Kenneth Wood en 1947 y contaba con un mecanismo exprimidor y un molinillo. Aunque útil, no tenía nada que ver con la sofisticación de las actuales, mucho más completas.
Las sartenes en la actualidad
Hoy en día, es posible encontrar en el mercado sartenes realizadas con distintos materiales, revestimientos y diseños. Unas de las más recomendables son las de aluminio, ya que se trata de un metal muy ligero que retiene y conduce el calor al tiempo que es resistente a la oxidación. Su revestimiento suele ser de titanio, cerámica o piedra, y su limpieza es de lo más sencilla.
También existen sartenes de titanio, muy resistentes y duraderas; de acero inoxidable, de gran versatilidad al admitir muchos tipos de elaboraciones culinarias; de hierro, que se dividen en las de hierro mineral y las de hierro fundido; de teflón, las más comunes durante mucho tiempo; cerámicas, con una gran capacidad antiadherente; o de granito, las que menos durabilidad presentan. ¡Las opciones son múltiples!
En La Moustache apostamos por las de aluminio antiadherente reforzadas con 7 capas extra de titanio. ¿Te animas a hacerte con una o con un juego? ¡Pruébalas y quedarás encantado con su eficacia!