Hay una regla universal en la que todos deberíamos estar de acuerdo, el cuidado prolonga la vida útil de cualquier objeto, y es que hasta para los seres humanos aplica esta ley. Bien, si asientes tal afirmación y eres el encargado de elaborar ricos platos en tu hogar, entonces es muy probable que te preocupes de estar cometiendo un mal manejo con los cuchillos de tu cocina, porque eso sería lo mismo que decir que estás matando a tus cuchillos.
Sin rayar en lo dramático, los errores que puedas estar cometiendo con esta herramienta de cocina disminuyen su durabilidad, y por supuesto, no hace falta decirlo, ¡no queremos esto! Amamos nuestros cuchillos y más si hemos invertido mucho dinero en su adquisición. Descubre qué puedes estar haciendo mal.
1. A veces usas este utensilio fuera de la cocina
¡Ay, mira acaba de llegar una caja sellada! La ansiedad de abrirla y admirar lo que contiene, hace que vayamos directo a los más fácil y rápido, el cuchillo de cocina. También es común usar la tijera de cocina para cortar un cupón de revista. Ya te estás acordando que lo haces, ¿no es así? Si esto es correcto, es hora de evitar esta mala práctica.
Los cuchillos y tijeras de cocina no fueron diseñadas como herramientas para objetos, aunque logres cortar de forma magnífica, ten presente que aumenta la probabilidad de que los inutilices, su hoja y filo se dañan más rápido.
2. Cortas en una superficie inadecuada
No te dejes llevar solo por el aspecto fuerte y duro que tienen, sin duda lo son, pero también ten presente que tienen un lado delicado, su filo. Usar tablas de vidrio, aunque son más higiénicas, acaba con su efectividad a gran velocidad.
Lo mismo ocurre con corta una manzana en un plato de cerámica, o aquello que todos hemos hecho al menos una vez, picar sobre la encimera. ¡No lo niegues!, si continuas haciéndolo, puedes dañar la hoja. Además de que se desafila más rápido.
3. Guardarlos en una gaveta
Es probable que este hábito sea una conducta aprendida de tu abuelita o tu mamá, pero guardarlos en la gaveta es un error. El bamboleo de una lado para el otro, ya sea porque hurgas en la gaveta o cierra y abres, no solo un cuchillo puede hacer una marca al otro, las hojas de estos suelen terminar opacas al pasar el tiempo.
Opta por una barra metálica que se instala en la pared o un bloque para esta herramienta, de esta forma los mantendrás en buen estado y en orden. Por otro lado, toma en cuenta que transportar de forma inadecuada es lo mismo que guardarlo en un cajón de la cocina, para ello hazte de un forro especial para ellos.
4. Una pregunta, ¿desde cuándo no los afilas?
Un chef te dirá que no hay un cuchillo de cocina más peligroso que aquel que no tenga filo, las razones son válidas, hay más probabilidades de que te cortes. Cuando no puedes cortar con efectividad, tiendes a aplicar más fuerza, por lo que podrías ocasionar un accidente en tu mano.
Además considera que al ejercer más presión, la hoja también se ve afectada. No esperes a cortar los alimentos como si tuvieras en tus manos un serrucho. Afílalo con regularidad, llévalos a un experto que haga un buen trabajo y no los arruine.
5. Dejarlos caer al suelo
En este punto dirás, que nadie deja caer al suelo esta utensilio de forma intencional, si ocurre es por accidente. En esto estamos de acuerdo, pero es posible que con más frecuencia se caiga un cuchillo que un plato de cerámica, solo porque consideres que son más delicados y por ello estás más consciente a la hora de agarrar uno. Debes tener el mismo cuidado, la punta o la hoja se pueden partir.
Adquirir un buen set de cuchillos que garantice durabilidad y buenos cortes, es algo en lo que no te puedes dar el lujo de cometer un error. En La Moustache te ayudamos, porque sabemos cuán importante es tener los mejores utensilios a tu disposición, para que te destaques en elaborar los deliciosos platos que tu familia tanto ama.
